En una licitación clave, el Tesoro logró un financiamiento neto de $360.000 millones

El Ministerio de Economía logró una exitosa renovación de vencimientos de deuda. Con un financiamiento neto por $358.000 millones superó ampliamente las expectativas. Este financiamiento extra servirá para cubrir el déficit del Tesoro.

La licitación del miércoles era clave, dado que vencía la elevada suma de $412.000 millones. Además, contaba con el antecedente de la última licitación de noviembre, en donde sólo se logró rollear el 84% de los vencimientos. No obstante, la aceptación de ofertas por $770.000 millones permitió no sólo cubrir los vencimientos sino que dejó un importante excedente, el más alto desde 2020.

El Ministro de Economía, Sergio Massa, explicó que  "se presentaron ofertas por $1,2 billones", pero que "se aceptaron ofertas por $770.000 millones" de modo que se superaron "ampliamente los $412 mil millones que se renovaban". "El resto se rechazaron por no ser ofertas con tasas convenientes", indicó.

A su vez, remarcó que “se completó ampliamente la renovación que vencía” y que incluso “se amplió el financiamiento al sector público por más de $360.000 millones”. A raíz de esto, puntualizó que “es la presentación de ofertas más grande desde 2020 a la fecha”.

"Estamos cerrando el año cumpliendo el compromiso de financiar el funcionamiento del Tesoro sin la utilización de adelantos transitorios del Banco Central", indicó.

De los $770.000 millones que se aceptaron, el 40% se destinó a un solo bono, la Letra de Descuento (Ledes), que vence el 31 de marzo del año próximo. Por este título se pagó una tasa efectiva anual récord de este gobierno del 117,4%.

Por su parte, los bonos indexados por inflación (los CER) o los dólar linked representaron el 34% de las ofertas recibidas. Mientras tanto, el título con vencimiento más lejano (un bono que vence en noviembre de 2027) apenas se llevó $10.868, el 1,4% de las propuestas.

Economía apeló a un gran menú de opciones para evitar repetir el resultado de la licitación de noviembre y lograr una mayor confianza del sector privado. Una de las medidas fue apelar a las grandes empresas importadoras, al disponer una letra amortizable en tres pagos a abril de 2028.

Además apeló a los bancos, al ofrecerles nuevamente títulos a 2027 ajustables por la tasa Badlar —la misma tasa promedio que pagan los bancos por depósitos a plazo fijo—. Gracias a esto, las entidades pueden constituir encajes de depósitos a plazo fijo, cajas de ahorro y cuenta corriente por hasta un 5 por ciento.

Con este gran vencimiento de deuda superado y con una última licitación pequeña el 28 de diciembre, el Tesoro prácticamente cierra el 2022 habiendo cubierto vencimientos y con financiamiento neto que le da aire al déficit del sector público.